lunes, 13 de septiembre de 2010

Imagina ...

Imagina que de golpe te murieses. Toda tu vida detenida de un golpe.

Tu ser, todos tus recuerdos, lo que eras se difuminaría como el humo en el aire. Todos tus proyectos quedarían sin terminar, parados, preparados para coger polvo en el salón del olvido.

Imagina que por un tiempo, te concediesen el poder volver, todo ese tiempo prestado para que pudieses seguir.

Imagina como cambiarían tus prioridades, como cambiaría tu vida.

Tal vez te volverías loco o serías demasiado cuerdo y vivirías una carrera sin freno, una vida sin mesura, ya que cualquier día podría ser el último.

O simplemente seguirías con tu vida normal, resignado ya que cualquier día podría ser el último sin tener en cuenta lo sucedido.

O tal vez tu vista cambiase, y mirarías a tu alrededor y aprenderías a apreciar las cosas, los detalles, la simpleza de la vida, el poder ver una nueva luna en el cielo ...

Imagina que yo lo imagino, o tal vez te lo estoy explicando ...

A veces levanto la vista y miro hacia atrás, miro al camino hecho y veo aquella oscuridad que me envolvió, que detuvo mi vida en seco. Miro hacia atrás y veo como se despierta en mí, mi oscuro acompañante. Hace tiempo que lo deje atrás en el camino, pero parece ser que ha vuelto, que poco a poco se ha metido en mi.

Imagina que tal vez por eso he vuelto por aquí ... o tal vez no ...