"Ahí, al final de la calle, ya llega."
No podía evitar los nervios por su llegada, venía con un poco de retraso, pero ahí estaba.
Hace un año lo vi partir por esta misma calle, con su maleta, su traje de colores ocres, su cabello despeinado por el aire.
Le vi partir ligero de equipaje, tan ligero como llegaba. Ese aire nostálgico que siempre había tenido, lo rodeaba.
Su visión despertaba en mí sensaciones de tristeza, me sentía cansado, aletargado. Mi cuerpo pedía entrar en un estado de hibernación que no se podía permitir.
A su alrededor el tiempo parecía detenerse, las cosas se volvían más lentas. Todo parecía prepararse para irse a dormir.
Aun así, estaba alegre de que llegase.
Este año su llegada era especial, muy especial, marcaba el inicio de la última etapa de un viaje, un viaje iniciado hace ya largo tiempo.
Pero no era momento de pensar en eso, intente despertar mi cuerpo, me puse mi mejor sonrisa y decidido abrí la ventana, dejando que el aire frío llenase mi cuarto, deje que se llenase de los olores que traía.
Lo salude desde la ventana y claramente le dije
Acompáñame en la última etapa de mi viaje, y cuando partas, espero que lleves a lo largo del mundo la buena nueva de la llegada de Lita.
No podía evitar los nervios por su llegada, venía con un poco de retraso, pero ahí estaba.
Hace un año lo vi partir por esta misma calle, con su maleta, su traje de colores ocres, su cabello despeinado por el aire.
Le vi partir ligero de equipaje, tan ligero como llegaba. Ese aire nostálgico que siempre había tenido, lo rodeaba.
Su visión despertaba en mí sensaciones de tristeza, me sentía cansado, aletargado. Mi cuerpo pedía entrar en un estado de hibernación que no se podía permitir.
A su alrededor el tiempo parecía detenerse, las cosas se volvían más lentas. Todo parecía prepararse para irse a dormir.
Aun así, estaba alegre de que llegase.
Este año su llegada era especial, muy especial, marcaba el inicio de la última etapa de un viaje, un viaje iniciado hace ya largo tiempo.
Pero no era momento de pensar en eso, intente despertar mi cuerpo, me puse mi mejor sonrisa y decidido abrí la ventana, dejando que el aire frío llenase mi cuarto, deje que se llenase de los olores que traía.
Lo salude desde la ventana y claramente le dije
Hola otoño
Acompáñame en la última etapa de mi viaje, y cuando partas, espero que lleves a lo largo del mundo la buena nueva de la llegada de Lita.
9 comentarios:
Muy buen post, al principio no sabía de que hablabas ;) Ainssss... me encanta el otoño.
Besos.
Mi dulce Xiluso,
Lina, ...nuestra Lina, es la que te hará eterno, La que ha de proyectar sobre el muro tu sombra, la que te hará nacer cada día y, en ella, te reconocerás.
Sí, dulce amigo, Lina te ata a la vida y ha levantado en tus ojos una chispa que brilla como una luna llena.
Falta poco y...aquí seguiré...pra disfrutar de su llegada.
Un abrazo
Pues yo no estoy preparada para su llegada...siempre me recibe con los brazos en cruz...no dispuesta a darme tregua.
A mi lo único que me gusta es el verano, aunque tampoco es que me disgusten las otras estaciones. Si acaso el invierno es la que más odio.
Un abrazo.
Lara, je, je, me gustra hacerme el misterioso :P
Si Dulce Luna, su llegada cambiara mi vida, lo presiento, se nota en el ambiente.
Vanessa, espero que no hables de mi Lita :P, y no, el otoño con sus amarillos pastel nos abre los brazos a todos ...
NocheOscura, todas son bonitas si les buscamos el punto.
Lo mejor del otoño es salir al campo y ver los colores... lastima no ser pintora...
Aiyana pero si tu puedes pintar con tus letras :P
El otoño es precioso, lastima que poco a poco se va perdiendo, y pasamos directamente del calor al frio....
yo el mismo día de tu Lita, plantaría un arce del amor....cuando ambos sean mayores tendrán la misma altura. y es precioso.
vanessa.
yo tb fue fan del otoño!
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